En
la firma del mencionado documento de cesión estarán presentes como receptores
el alcalde Ginés Campillo y el concejal de Archivos y Bibliotecas, Juan Carlos
López.
El
grabado fue realizado por expreso deseo del fraile mazarronero Diego Vibanco,
quien se lo encargó al artífice grabador murciano Domingo Ximénez de Cisneros
en el año 1765. Consta de dos partes bien diferenciadas: una superior donde
observamos la imagen de la Purísima Concepción que se veneraba entonces en su
iglesia convento de Mazarrón, y otra inferior donde aparece un precioso dibujo
que evoca el Milagro sucedido en la madrugada del 17 de noviembre del año 1585
cuando varios centenares de piratas berberiscos huyeron inexplicablemente
cuando ya se disponían a saquear la villa donde todos sus vecinos dormían.
Quizá
lo más interesante del grabado sea esa parte inferior porque nos muestra cómo
era la población en el año 1765, con aspectos inéditos de la arquitectura
urbana de la época. En ese sentido es la imagen más antigua conocida hasta este
momento de Mazarrón, lo que le confiere al grabado el carácter de un documento
único de valor incalculable para entender la historia gráfica del municipio.
Se tuvo conocimiento hace aproximadamente un año de la existencia del grabado en una pequeña localidad de Almería y que su propietario no quería desprenderse de él, pero, tras complejas negociaciones, fue posible traerlo al municipio de donde un día salió. Todo ese proceso ha sido llevado a cabo por el cronista oficial Mariano Guillén quien, una vez logrado ese objetivo, decidió libremente que pasase a formar parte del patrimonio histórico y cultural de Mazarrón. Casi de manera simultánea, el alcalde Ginés Campillo encargó a Guillén un estudio pormenorizado del documento, que éste ha realizado durante los últimos meses, consultando las fuentes documentales y visitando archivos franciscanos donde se pudiera arrojar luz a la historia de la estampa religiosa. Dicho estudio desvela toda la historia y vicisitudes del grabado, así como su preciosa iconografía, pero, sobre todo, muestra ese carácter de documento fundacional que nos singulariza como población surgida de una leyenda sublime.
Finalmente, también por iniciativa de Ginés Campillo, se ha editado el mencionado estudio junto a un facsímil del grabado que serán entregados en una misma carpeta a los fieles que asistan el próximo viernes 17 de noviembre a la misa de la renovación del voto en el santuario de la Purísima. De esta forma, el grabado que encargase fray Diego Vibanco en 1765 para ofrecer a los fieles mazarroneros en el Santuario, volverá a repartirse, 258 años después, en el mismo lugar.