Antes de ser ejecutado de un tiro en la nuca, sufrió brutales torturas. Las agentes de la autoridad encargados de la investigación del caso creen que se trata de un crimen de corte mafioso, obra de un profesional. El cadáver apareció cerca de su vehículo, que se encontraba en el cauce de una rambla de Totana, en una zona apartada llena de matorrales y de poco tránsito.
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