Fuente: Guardia Civil (Ministerio del Interior)
La
Guardia Civil de la Región de Murcia ha desarrollado una
investigación para esclarecer la sustracción de numerosas piezas de
joyería en dos domicilios, sitos en Puerto de Mazarrón, que ha
culminado con la detención de una persona como presunta autora de
delito continuado de hurto.
De
las 21 joyas sustraídas, valoradas en 60.000 euros, han sido
recuperadas y entregadas a sus legítimas propietarias piezas por
valor de 12.000 euros.
La
investigación se inició cuando dos vecinas de Puerto de Mazarrón
denunciaron ante la Guardia Civil la desaparición de
numerosas joyas de sus domicilios, si bien no habían percibido daños
en cerraduras, ventanas u otros accesos a las viviendas.
La
Benemérita inspeccionó los inmuebles donde observaron la ausencia
de señales de violencia o fuerza en los accesos. Estos indicios
centraron la investigación en averiguar la identidad de las personas
que, de forma habitual u ocasional, podían tener acceso a los
domicilios.
Hurtos
progresivos
Los
testimonios de las perjudicadas permitieron determinar que las 21
piezas de joyería sustraídas fueron desapareciendo de los
domicilios en pequeñas cantidades y en un periodo de tiempo
dilatado, por lo que, a priori, no se percataron de su falta.
Las
pesquisas practicadas permitieron averiguar que, casualmente, en
ambos domicilios trabajaba la misma empleada doméstica, por lo que
se iniciaron las labores dirigidas a su identificación y
localización.
Paralelamente
se inspeccionaron numerosos establecimientos dedicados a la
compra-venta de oro con el objetivo de localizar los efectos robados,
en uno de los cuales, sito en Cartagena, fueron identificadas varias
piezas que habían sido vendidas en diciembre del pasado año, si
bien, ya habían sido destinadas a su fundición.
La
identidad de la persona que había vendido las joyas coincidía con
la de la empleada doméstica por lo que, una vez localizada, ha sido
detenida como presunta autora de delito continuado de hurto.
La
actuación ha finalizado cuando la arrestada – española, de
52 años– ha entregado a la Guardia Civil parte de las joyas sustraídas,
valoradas en 12.000 euros, que una vez identificadas por sus
legítimas propietarias, les han sido devueltas.
La
detenida, las diligencias instruidas y los efectos recuperados han
sido puestos a disposición del Juzgado de Instrucción de Totana
(Murcia).